La sorpresa de los datos y el movimiento (esperado o no) del Euro
Lo que muchos analistas daban por descontado se quedó corto. La inflación en la eurozona ha vuelto a subir por encima de lo previsto y eso ha agitado los mercados. El dato, lejos de calmar el ambiente, ha encendido aún más las preguntas sobre qué va a hacer el euro frente al dólar en los próximos meses.

Para ponerte en contexto rápido: en marzo, las expectativas de inflación a 12 meses en la zona euro subieron al 2,9 %. Eso es bastante más de lo que se esperaba. Y aunque pueda parecer que esto debería reforzar al euro, lo cierto es que el EUR/USD no ha reaccionado con fuerza. Es más, en algunos momentos ha seguido cayendo.
La pregunta lógica es: ¿por qué si hay más inflación, el euro no sube?
No es solo la inflación, es todo lo que hay alrededor
Aquí es donde entra la parte que suele pasar desapercibida. La inflación no es lo único que mueve el tipo de cambio. Hay otros factores que están pesando más. Uno muy claro es la política del Banco Central Europeo.
En abril, el BCE decidió bajar los tipos de interés hasta el 2,25 %. Esto, aunque ayuda a reactivar la economía, hace que el euro pierda atractivo frente a otras divisas, sobre todo el dólar. Al final, los inversores buscan rentabilidad, y si en Estados Unidos los tipos siguen más altos, el dinero se va allí. Es así de simple.
Además, el panorama global no ayuda. Estados Unidos ha subido los aranceles a productos chinos y eso está tensionando el comercio internacional. Si China deja de exportar a EE. UU., puede volcar parte de su producción en Europa. Eso mete más presión en los precios aquí y complica aún más el trabajo del BCE.
Y a eso súmale que el petróleo ha bajado, lo que también tira de la inflación hacia abajo, aunque en este caso parezca una buena noticia.
El resultado: un cóctel que deja al euro en una posición débil, al menos de momento.
¿Qué puede pasar con el EUR/USD en los próximos meses?
Nadie tiene una bola de cristal, eso ya lo sabes. Pero lo que sí está claro es que la evolución del EUR/USD va a estar muy ligada a dos cosas: la evolución de la inflación real en la eurozona (no la esperada) y lo que haga el BCE con los tipos.
Si la inflación sigue por encima del objetivo, pero el BCE no actúa con firmeza, lo lógico es que el euro siga flojeando frente al dólar. A los mercados no les gusta la incertidumbre, y ahora mismo el BCE está jugando con fuego entre estimular la economía y contener los precios.
Así que, si estás pendiente del tipo de cambio para tus inversiones, tus ahorros en dólares o simplemente porque te vas a Estados Unidos este verano, mantente alerta. Este no es un momento cualquiera.
El dato de inflación ha sido un toque de atención. Pero el movimiento real, el importante, puede estar todavía por venir.