Una semana más, todos pendientes de las divisas y de cómo afrontaran la última semana del mes de agosto, para comenzar con el «nuevo curso». Las tensiones con Rusia, las intervenciones de organismos internacionales, y las políticas económicas influyen día a día en la evolución de las divisas, y ponen a los mercados y expertos de todo el mundo en constante alerta.
El dólar comenzaba la semana sin sobresaltos. Ya a mitad de semana con las intervenciones de algunos organismos como la Fed, se notaban algunos cambios. El miércoles el dólar subió frente al euro, y también antes la mayoría de las divisas importantes. Destacar las ganancias bursátiles ante las nuevas noticias de política económica. Por un euro se pagaban 1,3260 dólares, frente a los 1,3321 dólares del día anterior, mientras que por un dólar se pagaba 0,7542 euros, más que el cambio del martes, 0,7507 euros.
El dólar ganó terreno también frente a otras monedas, como el yen, situando el cambio en 103,76 yenes por cada dólar, así como con la libra esterlina, el franco suizo, el dólar canadiense y el peso mexicano. La subida del dólar y las ganancias bursátiles, ya por tercer día consecutivo, acercan al S&P 500 a un máximo histórico. Se estima una eliminación antes de lo previsto de los estímulos monetarios, como por ejemplo la subida de tipos de interés, ya que la mayoría de indicadores tienen ya un comportamiento positivo.
Se ha publicado que en octubre terminarán las inyecciones de liquidez en EEUU, pero no se sabe la fecha de la posible subida de intereses. Aunque lo más probable es que sea el año 2015.
Para terminar la semana , el dólar perdió posiciones frente al euro, después de los buenos resultados de las últimas jornadas. Por un euro se pagaban 1,3281 dólares, frente a los 1,3260 dólares del miércoles, mientras que por un dólar se pagabaN 0,7529 euros, menos que los 0,7542 euros del día anterior. El dólar ganó terreno ante el yen, con un cambio de 103,85 yenes por cada dólar, y también ante la libra esterlina, pero bajó frente al franco suizo, el dólar canadiense y el peso mexicano.
Fotografía: shutterstock
